El cuidado de la piel del rostro suele ser un hábito de muchas personas, no obstante, con el auge de las redes sociales algunos se dejan llevar por los consejos de influencers sobre las rutinas de skincare sin consultar con un dermatólogo sobre los productos más adecuados.
De acuerdo con varios medios especializados consultados por El Diario, el uso excesivo de productos cosméticos para realizar las rutinas de belleza y limpieza del rostro pueden acarrear una serie de riesgos y efectos adversos.
Un estudio publicado por el Journal of the American Academy of Dermatology reveló que este tipo de pŕacticas desmedidas puede provocar dermatitis, irritaciones cutáneas, alergias e incluso empeorar afecciones preexistentes como el acné o la rosácea.
Uno de los efectos más comunes del exceso de cosméticos es la irritación, debido a que la piel tiene un límite en cuanto a la cantidad y tipo de productos que puede tolerar. Cuando se aplican múltiples capas de diferentes fórmulas, especialmente aquellas que contienen ingredientes activos como ácidos exfoliantes (ácido salicílico, ácido glicólico) o retinoides, se corre el riesgo de sobrecargar la piel. Esto puede resultar en enrojecimiento, picazón y descamación.
El medio especializado Con Salud también coincidió con el estudio sobre el uso indiscriminado de cosméticos en las rutinas de skincare, argumentando que aumenta el riesgo de desarrollar alergias cutáneas provocadas por las fragancias, conservantes y otros aditivos químicos que contienen los productos.
Para evitar este tipo de efectos, es recomendable que la persona acuda a un especialista que le recete e indique cuáles productos son adecuados para su tipo de piel y necesidad, tomando en cuenta factores como la edad, la elasticidad de la piel, las alergias, entre otros.

Otros problemas cutáneos provocados por un incorrecto skincare
Otro portal consultado fue SmartClinic, en el que mencionan algunos problemas cutáneos relacionados con los productos para el cuidado de la piel, por ejemplo, el uso excesivo de cosméticos puede ser perjudicial para quienes padecen dermatitis.
Los expertos explican que al aplicar múltiples productos en la piel se corre el riesgo de sobrecargarla y alterar su barrera natural, lo que no solo aumenta la sensibilidad cutánea, sino que también puede desencadenar brotes o empeorar los síntomas existentes.
La rosácea es otra afección crónica que afecta principalmente el rostro, que se caracteriza por un enrojecimiento persistente, vasos sanguíneos visibles y pápulas similares al acné. Al abusar de los cosméticos, se pueden desarrollar brotes, sobre todo por la aplicación constante de exfoliantes agresivos o tratamientos tópicos sin supervisión médica.
Con respecto al acné, los medios consultados por El Diario señalaron que el uso prolongado de productos puede obstruir los poros y agravar el problema.
Otra afección cutánea que podría desencadenarse se denomina “efecto rebote”, y consiste en el fenómeno en el que algunos tratamientos para la piel pueden causar un aumento en la producción de sebo una vez que se interrumpe su uso debido a una aplicación excesiva o incorrecta.

Consejos para una rutina saludable
La dermatóloga Susana Misticone explicó en una entrevista previa para El Diario que dependiendo del tipo de piel de cada persona, se podrá saber qué tipo de productos se aplicarán.
Misticone aconsejó realizar una limpieza facial para probar. Para ello, la persona debe lavar su rostro empleando un jabón neutro y luego observar la reacción de la piel.
“Si sientes tirantez o sequedad, es probable que tengas piel seca. Si notas brillo o grasa, puedes tener piel grasa. Al experimentar ambas características, sobre todo grasa en la zona T (en referencia a la frente, nariz y mentón), es posible que tengas piel mixta”, indicó la experta.
La especialista también ofreció una serie de recomendaciones a tener en cuenta antes de iniciar una rutina de skincare:
-Tras identificar el tipo de piel, seleccionar los productos adecuados.
-Usar un limpiador suave y sin fragancias para eliminar impurezas sin irritar la piel.
-Hidratar el rostro, incluso si la piel es grasa, lo importante es usar una crema hidratante adecuada para cada tipo de piel.
-Usar protección solar diaria con FPS (factor de protección solar) de mínimo 30, aunque lo ideal es 50.
-Comprar productos de acuerdo a cada necesidad específica como acné, arrugas o hiperpigmentación.
-Evitar ingredientes que pueden causar irritaciones, especialmente si la piel es sensible.
-Establecer una rutina constante, aplicando productos en el orden adecuado (limpieza, tonificación, tratamiento, hidratación, protector solar).
-Planificar visitas regulares al dermatólogo, al menos una vez al año para evaluar la efectividad de la rutina y realizar ajustes según sea necesario.
La entrada Rutinas de skincare: cómo afecta el uso excesivo de cosméticos a la piel se publicó primero en El Diario.