Dos policías resultaron heridos este sábado 1° de marzo en Cúcuta, capital del departamento colombiano de Norte de Santander, fronterizo con Venezuela, en un ataque atribuido a la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN).
El comandante operativo de Seguridad Ciudadana de Cúcuta, el teniente coronel Julio Alexander Olaya, dijo que el atentado ocurrió frente a un conjunto de apartamentos.
Explicó que “al paso de una patrulla conformada por dos motocicletas, fue activado un artefacto explosivo, donde resultaron lesionados dos policías: un subintendente y un patrullero”.
Añadió que los dos policías fueron llevados a un hospital local, donde fueron atendidos, y el primer reporte médico indicó que su vida no corre peligro.
“Estas acciones terroristas se están ejecutando como retaliación a los golpes contundentes (…) contra el grupo armado ELN”, aseguró el alto oficial.
Crisis de violencia en Norte de Santander
Cúcuta vive una grave crisis de violencia por la creciente presencia de la guerrilla del ELN, que ha intensificado sus ataques en Norte de Santander.
El pasado 19 de febrero, desconocidos dinamitaron el peaje de Villa del Rosario, ubicado en la autopista internacional que comunica a Cúcuta con la ciudad venezolana de San Antonio del Táchira, dejando a cinco personas heridas, y atacaron también tres puestos policiales.
Pese a que las autoridades no han identificado a los responsables de esos ataques, todas las miradas apuntan al ELN, que hace poco más de un mes le declaró la guerra al Frente 33 de las disidencias de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) en la región del Catatumbo, donde han sido asesinadas al menos 63 personas y cerca de 85.000 se han visto afectadas por la violencia.
La presencia del ELN no es nueva en Cúcuta y su área metropolitana, pues desde hace décadas esa guerrilla se mueve por la frontera, por lo que los dos gobiernos anunciaron en enero una colaboración militar para combatirla.

Violencia en Cúcuta, principal ciudad fronteriza con Venezuela
Cúcuta también vive desde el año pasado una ola de violencia de bandas criminales dedicadas al narcotráfico y la extorsión, por lo cual las autoridades regionales reclaman al gobierno más atención a la crisis de la seguridad.
“La escalada terrorista (…) en Cúcuta y Villa del Rosario deja en evidencia la desidia con que este gobierno atiende la crisis de seguridad del departamento”, expresó en su cuenta de X el senador Edgar Díaz Contreras, del partido Cambio Radical.
Según Contreras, los consejos de seguridad y puestos de mando unificados que hace el gobierno cada vez que resurge la violencia en Norte de Santander, solo han servido “para concluir que estamos solos y sálvese quien pueda”.
“El terror, zozobra y angustia son lo que ha vivido Cúcuta y su área metropolitana; ya no solo es el Catatumbo y no pasa nada. Más acciones y menos consejos de seguridad”, agregó Díaz.

Ante el temor de nuevos ataques, las autoridades ordenaron ayer un toque de queda que terminó a las seis de la mañana de este viernes, así como la suspensión de las clases en los colegios de Cúcuta y su área metropolitana y en la región del Catatumbo, medida válida por hoy.
“No vamos a permitir que Cúcuta sea tomada por ningún grupo al margen de la ley. Desde hoy, Cúcuta será blindada para garantizar la seguridad de los habitantes”, resumió el alcalde de Cúcuta, Jorge Acevedo.
Con información de EFE.
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