El jefe de la diplomacia de Estados Unidos, Antony Blinken, ha puesto este lunes la pelota sobre el tejado de Hamás, al asegurar que Israel apoya el texto presentado por su país la semana pasada en Doha, la capital de Qatar, para alcanzar un alto el fuego en Gaza. Lo ha asegurado en Tel Aviv, tras una reunión con el primer ministro, Benjamín Netanyahu, que ha durado casi tres horas y ha calificado de “muy constructiva”. Se trata del borrador de consenso sobre un alto el fuego en Gaza por fases elaborado la semana pasada por los mediadores. En teoría da respuesta a las inquietudes tanto de Israel como de Hamás, pero el movimiento islamista acusa a la Administración de Joe Biden de haberse alineado descaradamente en Doha con su gran aliado —”Blinken actúa como si fuese un ministro en el Gobierno israelí”, ha dicho uno de sus líderes, Sami Abu Zuhri— en vez de forzarlo a cumplir lo previamente acordado. En este tenso contexto diplomático, el brazo armado de Hamás ha reivindicado un ataque fallido con bomba en Tel Aviv y anunciado el regreso “a primer plano” de los atentados suicidas mientras Israel continúe sus “masacres y desplazamientos” en Gaza.