La represión en Venezuela desatada tras las elecciones ha escalado de manera alarmante. La Misión Internacional Independiente de la ONU ha publicado este martes un informe en el que acusa al Gobierno chavista de haber cometido crímenes de lesa humanidad en el periodo que comprendió el antes, durante y después de las presidenciales que se celebraron el 28 de julio, en las que presumiblemente venció la oposición. El presidente Nicolás Maduro se niega a reconocer la derrota y asegura que volverá a tomar posesión del cargo el 10 de enero de 2025. La comunidad internacional ha tratado, en estos casi tres meses, de buscar una salida negociada para Maduro y el resto de dirigentes chavistas, sin éxito por el momento.