El Consejo Nacional Electoral (CNE) de Venezuela ha proclamado en la madrugada del lunes como ganador de las elecciones presidenciales a Nicolás Maduro con el 51,2% de los votos frente al 44,2% del opositor Edmundo González Urrutia. La autoridad electoral, controlada por el chavismo, ha cifrado la participación en el 59% con el 80% de las actas escrutadas y ha calificado la tendencia de “irreversible”. Maduro ha defendido su triunfo. La oposición, encabezada por María Corina Machado, ha rechazado el resultado. “Es un ultraje a la verdad”, ha enfatizado la dirigente al denunciar irregularidades en la transmisión de las papeletas. El secretario general de la ONU, António Guterres, ha instado al Gobierno de Maduro a contar los votos “con total transparencia” y a la dirigencia política a actuar “con moderación”. Brasil, la democracia más grande de América Latina, ha pedido a través de su Cancillería la publicación de las actas para dar “transparencia y legitimidad” al conteo de votos. El Centro Carter, que ofició de observador internacional, instó este lunes al CNE a publicar “de inmediato” las actas electorales. Estados Unidos y Chile también han cuestionado los resultados. China e Irán han aplaudido la “exitosa celebración” de los comicios.